La pandemia del coronavirus y el llamado al aislamiento social ha supuesto un cambio drástico en las dinámicas laborales, y un tremendo desafío para las empresas y sus equipos. Pero el teletrabajo es posible y acá compartimos algunas claves para conseguirlo sin que decaiga la productividad y eficiencia de tu empresa.
Por: CES, UAI
Entrega las herramientas necesarias
Es la base para conseguir el éxito en el trabajo remoto: contar con los elementos para seguir desempeñando las funciones que a cada uno le corresponden. Asegúrate que todas las áreas cuenten con lo necesario, como computadores, celulares, programas específicos, canales de comunicación expeditos, etc. Entendemos que no todas las empresas tienen los recursos para darle un computador a cada uno de sus trabajadores, pero juntos encuentren la forma de que puedan continuar sus funciones desde sus casas. El apoyo es clave, no solo desde el aspecto material.
Establece una nueva rutina laboral
Para quienes no están acostumbrados a trabajar a distancia, mucho menos desde sus casas, uno de los mayores desafíos para no decaer en eficiencia es la organización. Por eso se deben establecer ‘nuevas reglas del juego’; una nueva dinámica de trabajo basada en este inesperado escenario laboral. Fija horarios, pausas, metas diarias o semanales y transmítele a tu equipo la importancia que tiene respetar este orden. La rutina, además, es una excelente forma para dar una cuota de normalidad a este inusual panorama y con ello calmar la ansiedad e incertidumbre que muchos miembros de tu empresa pueden sentir en este periodo.
“Desarrolla rituales y ten una disciplina para manejar el día. Programa una hora de inicio y de término. Ten un ritmo. Dúchate, vístete, incluso si no es algo que normalmente usarías para ir a la oficina, luego comienzo con las actividades del día. Si acostumbras a moverte físicamente, asegúrate de incorporarlo en tu día”, Tsedal Neeley, profesor de Harvard Business School (Harvard Business Review).
Apóyate en la tecnología
Afortunadamente, hoy la tecnología ofrece múltiples plataformas para compartir información y mantenernos conectados en todo momento. Si ya están acostumbrados a utilizarlas no supondrá un gran problema, pero si no es así, es importante que todos se embarquen en este desafío. Busca las herramientas que más se acomoden al modo de trabajo de tu empresa, pruébalas, capacita a tu equipo sobre cómo utilizarlas, habla con ellos constantemente en busca de sugerencias y nuevas ideas.
No pierdas al contacto con tu equipo
Aunque por un tiempo no se verán personalmente, es fundamental que la distancia no implique perder el contacto con tu equipo. Preocúpate de cada uno, haz un seguimiento de su trabajo y sobre todo comunícate directamente para saber su percepción y dificultades en este nuevo escenario. No esperes a que aparezcan los problemas, adelántate a ellos por medio de la comunicación expedita y periódica.
“Reúnete con tu equipo al menos una vez a la semana. En un ambiente remoto la frecuencia de contacto no puede disminuir. Si acostumbran a tener reuniones, continúa haciéndolo. De hecho, el contacto debería aumentar entre todo el equipo y sus miembros. Los empleados nuevos, aquellos trabajando en proyectos críticos y las personas que necesitan más contacto necesitarán más reuniones uno a uno”, Tsedal Neeley, profesor de Harvard Business School (Harvard Business Review).
Crea una buena cultura de teletrabajo
Es probablemente el desafío más macro que exige el home-office y que deberás considerar en todo momento de esta transición. Conforme a este cambio espacial es fundamental que se vaya gestando una nueva cultura laboral. Aunque no existe un fórmula que garantice el éxito, estos son algunos aspectos esenciales que debes considerar:
Asegúrate de que todo tu equipo se mantenga al tanto de lo que ocurre en la empresa. Que la distancia no sea sinónimo de exclusión, sino que potencia aún más la comunicación interna para que nadie sienta que ha quedado fuera.
Transmite tranquilidad a tus empleados. Es un período de mucha incertidumbre (en todo sentido), así que es importante que en el trabajo se sientan seguros y contenidos.
Mantente cercano y disponible, aunque esto suponga un esfuerzo mayor en términos de tiempo. Las reuniones colectivas, pero también el contacto uno a uno son clave.